domingo, 14 de junio de 2015

El rayo y el trueno – Crónica de un Mayo Junior con Selaya inolvidable…

Intentar analizar desde la perspectiva del tiempo es lo mejor…. Siempre es lo mejor. No dejar que la cercanía con los acontecimientos artefacte su importancia… Por eso, ahora que es Junio y todo ha acabado es mejor empezar a hablar del Juvenil… Hoy que es Junio, hablemos del Junior…

El tiempo siempre da un poso a las cosas que pasan, las pone en su sitio. A las importantes las hace crecer, las hace pesar cada vez más en la memoria. A las menos importantes las olvida, las mete al cajón de lo menos relevante...

Es difícil hablar de lo vivido este año con el junior en Guadalajara. A los que llevamos un tiempo en el club se nos cierra la garganta y solo podemos articular en voz baja unas palabras, un "muy contentos" cualquiera antes de que se nos parta la voz de orgullo y, por qué no decirlo, emoción. Sera que es parte del peaje que hay que pagar por cada año que cada uno pasa vinculado a nuestras rojiblancas.

Nuestras chicas llevaron la frontera aún más allá, donde solo llegan las grandes capitales. Con decir que, tras superar la fase preliminar (enfrentándose a equipos representativos de Palma de Mallorca, Benidorm y Madrid) nos eliminó el club representativo de Valencia, heredero de Ros Casares, 2 veces campeón de Europa absoluta de club.... Está todo dicho.

Una vez más llegamos desde el basket femenino de Cantábria donde nunca nadie llego, competimos por lograr lo que nadie logró, lloramos por clasificarnos donde nadie se clasificó, reímos por hacer lo que nunca nadie hizo... Fuimos Selaya hasta las últimas consecuencias. Si podíamos pelear por el partido, lo hicimos hasta nuestro último aliento. Si el rival era mejor, hicimos todo lo que estuvo en nuestra mano por estar lo más cerca posible... Y dar la enhorabuena por la victoria (si eran humanas sangrarían, verdad chicas?).

Y así fue todo el fogonazo del éxito, de la satisfacción del trabajo (enorme trabajo) bien hecho, que cruzó como un rayo esas calurosas tardes de mayo de Guadalajara...

Mucha gente cuenta los segundos después del rayo hasta que llega el trueno, para estimar cuan cerca esta y estimar su impacto en las cercanías. Desde el gran relámpago del campeonato aún seguimos escuchando el trueno de las palabras de reconocimiento al club desde nuestras personas más cercanas, desde nuestra gente, que es la que de verdad importa. No importa si desde los medios de comunicación dan más o menos importancia a lo logrado al final, los periódicos no suelen hablar de sentimientos. Al menos los nuestros, no se miden en tinta derramada sobre papel de periódico.
Así que por ultimo pero por ser precisamente lo más importante, agradecer a nuestras chicas el habernos hecho jugar a ganador un año más y volver a soñar con jugar de tu a tu contra los mejores del país, llevando el listón a la última frontera...

Donde nadie en femenino llego antes...

Gracias a las 14 que nos llevaron hasta ahí por su trabajo descomunal todo el año...

Las 14 del 15. Es un bonito nombre para recordarlas, ¿no les parece?. Porque eso es, al menos, lo que merece la gente que hace cosas que antes nunca nadie ha hecho... Que se las recuerde.

Nosotros las recordaremos por siempre. Nunca olvidaremos la tremenda tormenta que su trabajo desato en Guadalajara un mayo de 2015.

Por mucho tiempo escucharemos en nuestro corazón el trueno tras el relámpago...


Gracias chicas…






No hay comentarios:

Publicar un comentario